Colombia Metal Festival

Lugar: Gran Carpa de las Américas de Corferias – Bogotá
8 de noviembre de 2024
Fotos y video: Andrés Pérez B. – Cristina Restrepo V.
Texto: Andrés Pérez B. – Joel Cruz
Organizado por: Cacique Entertainment

El Colombia Metal Festival celebró su primera edición con el preámbulo de cinco prefiestas, la primera de ellas realizada durante el pasado 23 de agosto en el ya reconocido Ace of Spades. Para la ocasión, las agrupaciones locales Prohecy of a Reborn, Hellfish, Vein, Cuentos de los Hermanos Grind y Soulburner se encargaron de darle potencia al toque. La segunda fecha de este ciclo fue el 6 de septiembre en Stones Plaza, donde se presentó al reconocido locutor y periodista Andrés Duran en un set musical de vinilos al sur de la ciudad, una modalidad muy bien recibida por los rockeros bogotanos.

Ace of Spades fue de nuevo el sitio para la realización de la tercer prefiesta que se llevo a cabo el 12 de septiembre donde se celebró un nuevo concierto previo e incluyendo a un cartel variado: Ingrand, Tears of Misery, Loathsome Faith, Diehard, Desecrate y Okinawa Bullet´s fueron los protagonistas de la velada. Al mes siguiente Retro Rock Bar fue el lugar elegido para una segunda ‘vinilada’ de Andrés Durán, realizada el 19 de octubre, lo que daría paso a la quinta prefiesta, realizada el 7 de noviembre en el Ace of Spades, ubicando en tarima a Herejía, Psycho Mosher, Guerra Total, Soulburner, los españoles Crisix y desde Estados Unidos, Incantation. Estos cinco encuentros fueron importantes para «calentar los motores» de lo que el CMF estaba preparando a su público, haciendo que la espera no se sintiera demasiado larga y asimismo, la conexión con el evento fuera más cercana.

El día para uno de los festivales más esperados del país llegó a la Gran Carpa las Américas de Corferias. ¿La fecha? el 8 de noviembre; todo prometía un óptimo desempeño del concierto en un lugar bastante propicio, ya que su capacidad es de 10 mil personas y de la cuál, aproximadamente 8 mil asistieron a cumplir la cita para poder darse el lujo de sacudir sus cabezas ante un cartel de 12 bandas con los más variados estilos de la música extrema, lugares de origen y trayectorias artísticas. Fue de hecho una gran celebración del Metal como género, aún con los resultados mixtos en todas y cada una de las presentaciones.

Colombia Metal Festival no se trató solamente de música: contó además con la participación de varios puntos de venta de CD´s, vinilos, merchandising, comidas y bebidas…Todo fue especial para alimentar la experiencia en torno a este certamen de sonidos extremos.

Las doce agrupaciones que hicieron parte del cartel hicieron temblar el escenario desde la 12:30 de la tarde con un público vigoroso; en consecuencia, las personas le transmitieron toda esa vibra a a los músicos. Ellos la recibieron de una manera tan entusiasta, que cada asistente los ovacionó al pasar cada minuto de sus respectivas presentaciones. Mientras las horas iban pasando, las dos localidades se fueron colmando de gente dispuesta a disfrutar una jornada cargada de sonidos extremos.

Colombia Metal Festival fue, es y seguirá siendo un acontecimiento importante para la música extrema en nuestro país, dada la oferta y demanda que ofrece su marca. Con un cartel que llenó las expectativas tanto de la organización, como del público y medios que hicimos presencia en esta primera edición, la mirada fija hacia una segunda entrega del festival ya se encuentra en marcha. CMF dejó una buena impresión y la espera ansiosa de que Cacique Entertainment empiece pronto los anuncios de la próxima fecha, así como de los próximos eventos a realizarse en Colombia.

Entrando más en detalle acerca de lo vivido el viernes 8 de noviembre, fue un día frio; con una lluvia típica de ola invernal, pero que después no tardaría en calentarse con la presencia en tarima de la banda bogotana Under Threat, ante un público reducido por causa de la hora, ya que era medio día. Esto no impidió que la banda se intimidara por la poca afluencia e incluyó temas de su más reciente producción ‘Impermaneance’, con un sonido muy cercano al que se realiza en Suecia actualmente.

Después de la presentación de Under Threath, el acto seguido fue Masacre, la banda toco 8 canciones incluyendo «Una Flor sobre mi Tumba» que viene incluida en el Ep «Barbarie y Sangre en Memoria de Cristo» y «Oh My God!!», canción que hace parte del álbum «Total Death» estos dos temas muy pocas veces los tocan en vivo, junto a los conocidos «Escoria», «Brutales Masacres», «Ola de Violencia», «Sangrienta Muerte», «Imperio del Terror» y «Death Metal Forever».

En el horario decía que la tercer agrupación sería Incantation, los fans de esta agrupación debieron esperar un poco más ya que hubo un cambio en el orden y la banda que se presento fue Crisix desde España con un sonido muy característico al Thrash Metal de la Florida, quienes hicieron que los asistentes se partieran la madre en el pogo y se quedarán sin cuello por causa de la energía emanada por esta gran agrupación.

Pasadas las 3:00 p.m. se veía cómo se iba llenando el recinto, cuando llegó el momento de ver a John McEntee de Incantation subirse a la tarima y entonar los 53 segundos que dura ‘Blissful Bloodshower’, incluido en el segundo álbum «Mortal Throne of Nazarene», su setlist paso por temas de sus primeros álbumes y del más reciente titulado «Unholy Deification». Los leads inquietantes se filtran sobre los blast-beats y las guitarras rítmicas evocan la esencia de la vieja escuela del Death Metal desde sus primeros años.

Más tarde llegó el momento de la ceremonia de los opuestos y unos de los shows más esperados: Samael, con un sonido envolvente, en un ambiente de oscuridad filtrada entre luces verdes, hicieron que la atmósfera fuese más tenue, cargada de Black Metal combinado con sonidos industriales, provocando una gala noctámbula y taciturna, donde la hegemonía tomó lugar dentro de este ritual con pasajes donde el reino de la luz sucumbió entre los espectadores.

Llego el turno para el Hardcore donde mucha gente aprovecho para hidratarse y comer algo mientras se presentaba la banda Chelsea Grin provenientes de Salt Lake (Utah), dentro de su repertorio tocaron su set de 8 canciones: Hostage, The Isni, My Damnation, Playing With Fire, Dead Rose, Sonnet of the Wretched, Sing to the Grave, Recreant. El vocalista de la banda posee cierta característica a la hora de cantar, ya que su voz gutural es profunda y desgarradora.

Mientras que llovía, se sentía en el recinto la llegada de los vientos desde Noruega; de esta forma, los himnos nórdicos de Enslaved ofrecieron uno de los mejores setlist, inundando el lugar de melodías vikingas, acordes progresivos y Black Metal, lo que constituyó una experiencia enriquecedora. La banda interpretó 7 canciones de su discografía: ‘Kingdom’, ‘Homebound’, ‘Forest Dweller’, ‘The Dead Stare’, ‘Havenless’, ‘Isa’, ‘Allfǫðr Oðinn’. El octavo acto de la jornada estuvo a cargo de la melancolía, la introspección y la alegoría, adentrándonos en un estado catatónico por medio de almas danzantes atrapadas por el frio y el vacío; había llegado la hora de ver en escena a Jonas Renkse y compañía, interpretando 10 canciones de la basta discografía de Katatonia. La tarima se tornó entonces en un ambiente oscuro y sobrio, donde las melodías de cada nota hicieron que el público estuviera receptivo ante la presencia de la agrupación, tocaron las canciones: ‘Austerity’, ‘Colossal Shade’, ‘Lethean’, ‘For My Demons’, ‘Forsaker’, ‘Leaders’, ‘Teargas’, ‘Criminals’, ‘My Twin’, ‘Evidence’.

El reloj marcaba las 9:15 p.m., hora que debería de estar Watain en tarima. Infortunadamente, tuvieron demasiados inconvenientes con el sonido y la batería, problemas técnicos que retrasaron su presentación y la agenda del evento. Después de 40 minutos de espera, por fin se pudo ver a Erik Danielsson —vocalista de la banda— con antorcha en mano y encendiendo cruces invertidas en el escenario y que arrojó al público después de terminada la introducción. Esta postura en tarima es habitual en todos sus shows, iluminada por una luz roja muy tenue y oscura; con certeza, funciona a la perfección para el ritual realizado por la banda, que además incluye baño de sangre a los seguidores. La banda ofreció un recital de siete canciones cargadas de blasfemia y Black Metal: ‘Hymn to Qayin’, ‘Legions of the Black Light’, ‘Devil’s Blood’, ‘The Howling’, ‘Serimosa’, ‘Total Funeral’y ‘Malfeitor’.

La agrupación que continuó fue Cattle Decapitation, quienes también tardaron demasiado tiempo para subirse a la tarima y lo cual volvió a afectar la agenda del CMF, logrando así un atraso de más de una hora. La banda tocó seis canciones con varias fallas en el sonido, afectando la voz y las cuerdas, haciendo imposible de escuchar.

Los fríos vientos de Escandinavia en la carpa se sintieron una vez más; todo por lo que el público le dio la bienvenida a una de las bandas más esperadas del evento: Satyricon, con un show cargado de misticismo, sombras, minimalismo, profundidad en cada riff… Destellos de luces que abrigaron una noche oscura en medio de melodías y sonoridades, orquestadas por causa del buen manejo en los teclados y que dieron gala oportuna a las atmósferas disonantes. El set fue compuesto por 10 canciones y con un recorrido en su discografía, desde el primer álbum «Dark Medieval Times» (1993) hasta lo más reciente Deep «Calleth Upon Deep» (2022): ‘To Your Brethren in the Dark’, ‘Filthgrinder’, ‘Now, Diabolical’, ‘Black Crow on a Tombstone’, ‘Deep Calleth Upon Deep’, ‘Walk the Path of Sorrow’, ‘Hvite Krists død’, ‘The Pentagram Burns’, ‘Fuel for Hatred’, ‘Mother North’ y la maravillosa ‘K.I.N.G’.

Después de la majestuosa presentación de Satyricon, se esperaba con ansias los cuernos vikingos que llegaron desde Estocolmo – Suecia, bajo la batuta de Johnny Hedlund en el bajo y las voces de Unleashed, quienes fueron los encargados de cerrar la primer versión del Colombia Metal Festival: la banda inició su presentación con el clásico «Before the Creation of Time»; acto seguido, fue el himno al generó que caracteriza la banda titulado «Death Metal Victory». Cuando se preparaban para la tercer canción, Johnny anuncia «Hammer Battalion» e indica que esta es la última, ya que la banda se vio afectada por los atrasos ocurridos anteriormente y por ende, se les cortó el tiempo en tarima. Lastimosamente, Unleashed no pudo ofrecer el show que habían preparado y el público salio con un sinsabor a causa de este percance.

El Colombia Metal Festival y su organización comandada por Cacique Entertainment ofrecieron un evento donde demostraron que los sonidos extremos son garantía para próximos conciertos en el país, pese a algunos inconvenientes que pueden suceder en el transcurso de un festival. Desde ya estan trabajando en lo que será la segunda edición del CMF y la realización de próximos eventos en Colombia.